No guardes nada para una
ocasión especial: cada día que vives es una ocasión especial.
Un amigo abrió el cajón de la cómoda de
su esposa y sacó un pequeño paquete envuelto en papel de seda que decía:
“Esto no es un simple paquete, es preciosa lencería”.
Tiró el papel que lo envolvía y observó la exquisita seda y el encaje. Ella lo había comprado hace 9 años en un viaje especial que realizaron juntos. Nunca llegó a usar la lencería.
Lo estaba guardando para una “ocasión especial”.
“Esto no es un simple paquete, es preciosa lencería”.
Tiró el papel que lo envolvía y observó la exquisita seda y el encaje. Ella lo había comprado hace 9 años en un viaje especial que realizaron juntos. Nunca llegó a usar la lencería.
Lo estaba guardando para una “ocasión especial”.
“Bueno” –pensó– “entonces, creo que esta es la ocasión”. Se acercó a la cama
y colocó la prenda junto con las demás ropas que iba a llevar a la funeraria.
Su esposa acababa de morir. Y volviéndose hacia mí, me dijo: “No guardes nada para una ocasión especial: cada
día que vives es una ocasión especial”.
Y hoy en día sigo pensando en esas palabras:
han cambiado mi vida.
han cambiado mi vida.
- Ahora
leo más y limpio menos.
- Ahora
me siento en la terraza y admiro la vista sin fijarme en las malas hierbas
del jardín.
- Paso
más tiempo con mi familia y amigos y menos tiempo en el trabajo.
- Quiero
experiencias para disfrutar, no para sobrevivir.
- Ya no
guardo nada. Uso mis copas de cristal todos los días.
- Me
pongo mi abrigo nuevo para ir al supermercado, si así lo decido y me da la
gana.
- Ya no
guardo mi mejor perfume para las fiestas especiales, lo uso cada vez que
me apetece hacerlo.
Las
frases “algún día…” y “uno
de estos días”,
están desapareciendo de mi vocabulario.
están desapareciendo de mi vocabulario.
Si vale la pena verlo,
escucharlo o hacerlo,
quiero verlo, escucharlo o hacerlo ahora.
No estoy seguro de lo que habría hecho
la esposa de mi amigo si hubiera sabido que no estaría aquí para el mañana que
todos tomamos tan a la ligera. Creo que hubiera llamado a sus familiares y
amigos cercanos. Quien sabe, a lo mejor, hubiera llamado a algunos antiguos
amigos para disculparse y hacer las paces por posibles enojos del pasado. Me
gusta pensar que hubiera ido a comer comida china, su favorita.
Son esas cosas dejadas sin hacer, las
que me harían enojar si supiera que mis horas están limitadas. Enojado
porque dejé de ver a buenos amigos con quienes me iba a poner en contacto
“algún día”… Enojado porque no escribí ciertas cartas que pensaba escribir “uno
de estos días”. Enojado y triste porque no les dije a mis hermanos y a mis
hijos con suficiente frecuencia, cuánto los amo.
Ahora trato de no retardar, detener o
guardar nada que pudiera aportar risa y alegría a nuestras vidas.
Y
cada mañana me digo a mí mismo que este día es especial, cada hora, cada
minuto… es especial, único e irrepetible.
Ahora
mismo es un buen momento para compartirlo con tus amigos y familiares. El
momento es ahora, no mañana. Ahora es mejor que "uno de estos días"
para compartir la alegría y motivación de disfrutar de la vida, que ese
"uno de estos días" está muy lejano o puede no llegar nunca...
0 Response to "CADA DÍA QUE VIVES ES ESPECIAL"
Publicar un comentario
Gracias por participar en esta pagina.